KENYA DAY 4

We woke up very early, to see the sun set beautifully in Masai Mara. This place has stolen our hearts. We started the day seeing a group of four lioness that were on a hill. Feelings and emotions were better than the first time. They have a rather intimidating look, but very special too. After that, we had the chance to see one of my favorite animals: rhinos! We followed a little rhino family and then we let them go. It was amazing and although Sara did not like them very much, she took gorgeous pictures of them. As you can see, there were always small birdies on them.

After that, we felt really hungry, so we looked for a safe spot to have our breakfast, near the river and puddles with rhinos. It was one of the best breakfast of my life! Once we were done, we went back to our camp, were we spent the rest of the day working and resting. The feeling of waking up before dawn in a wonderful place like Kenya has been thrilling… Smells, colores… Everything was new for us. And we tried to enjoy every single second.

Nos tocó madrugar de nuevo. Todo con tal de ver el amanecer desde nuestro jeep y comenzar a contemplar, los primeros animales del día. Masai Mara nos robó el corazón. Comenzamos viendo a un grupo de cuatro leonas que reposaban en lo alto de una colina y las sensaciones fueron incluso mejores que la primera vez. La mirada de este animal es increíblemente intimidante y muy especial. Más tarde tuve la oportunidad de ver a otro de mis animales favoritos: el rinoceronte. Después de seguir a una pequeña familia durante una hora más o menos, decidimos dejarles seguir su camino a través de la sabana… Fue alucinante, y aunque a Sara no le gustaron demasiado, he de decir que adoro las fotos que tomó de ellos. Siempre con algún pajarito encima descansando.

Más tarde, y ya con una sensación de hambre fuerte en el estómago, nos dirigimos a un punto seguro donde poder disfrutar de un desayuno al aire libre. Un pequeño espacio justo al lado del río y una piscina para hipopótamos fue el lugar elegido. Ha sido uno de los mejores desayunos de mi vida. Tras ver a algunos de estos ejemplares disfrutar en el rio, decidimos regresar a nuestro campamento, donde pasamos el resto del día, trabajando y descansando a partes iguales. La sensación de levantarte cuando todavía no ha salido el sol en un lugar tan apasionante como Kenya es increíble, los olores, los colores… Todo era nuevo para nosotras. Y tratamos de vivir cada segundo muy intensamente.